22/10/2015
Pues siguiendo con la música que escucho a la hora de escribir, en este apartado os pondré las composiciones que ha hecho mi buen amigo PRTR, muchas de ellas especialmente ambientadas en la novela que llevo escribiendo desde hace años y espero poder publicar algún día.
De corte electrónico y bastante (bastaaaaaante) oscuras, algunas de ellas te transportan hasta rincones de paranoia y desquicie, algunas me recuerdan a composiciones del magistral Akira Yamaoka en sus aportaciones a la saga Silent Hill.
Al final, está todo muy relacionado…
Escaleras mohosas que se hunden en las tinieblas, poca luz, humedad y calor sofocante, un cuchillo oxidado en la mano y la sensación de que tu tripa quiere liarla parda en el peor momento. Todos nos hemos visto alguna vez en una situación tan cotidiana como esa, ¿no? Bueno, eh, esto… escuchad Claustrofobia contenida y no me hagáis demasiado caso…
¿Qué sería de una situación de miedín sin ecos, silbidos, coros que se mezclan con el susurro del viento y todos esos topicazos tan chunchis? Deep Dark os llenará la cabeza de esos tópicos que, sin dejar de ser eso mismo, cumplen su función muy pero que muy bien. Dicen que los humanos sólo tememos a lo que desconocemos, y a mí esta canción me sugiere muchas cosas desconocidas. Me encanta.
¿Quién no se ha imaginado desiertos tenderetes de feria llenos de sangre y tripejas? Y tú deambulando solito bajo un cielo marrón intentando encontrar un peluche sin manchas rojas para tu novia. Qué cosas. Escuchad Verbena negra a ver si os parece lo mismo.
Según un viejo amigo mío, cuya intensa amistad hemos retomado hace poquito, para Niebla Impía piensa: «Es música de correr mientras municionas… buscando donde tomar aliento y secar el sudor que drenan tus mejillas. Esperando el fin y pensando en sobrevivir un día más…» La niebla siempre oculta cosas, no solamente fallos técnicos en videojuegos, sino alteraciones de la propia naturaleza humana; es la esencia del desconocimiento y por tanto es la esencia del miedo, como ya dije antes.
La niebla, aunque no sea impía, es peligrosa para conducir, no lo olvidéis.
En El mundo que no conociste, me he perdido muchas veces escribiendo sobre unos señores muy malos que salen en la novela que pronto espero publicar. Me cuesta no vender el color rojo, por más que lo intento.
Tras muchos años de hablar, conocernos, y una vez concluida su lectura de mi novela, PRTR se ha desmarcado con algo que, una vez más, alimenta mi perturbada imaginación. Esta composición la escucho genial y desprende mal rollo por todos sus poros, hasta en su duración, 3:33 min. Creo que no lo ha hecho adrede, pero PRTR, como todo buen compositor musical atormentado, tiene sus cosicas. Escuchadla que no tiene desperdicio…